Efímera estancia

REVERENCIANDO A LA VÍA LÁCTEA

Un gran día para empezar, quién sabe si es de nuevo o si todo queda aún por decidir, manejable, dócil e inocente se desenvuelve como puede en una estancia que aún no le pertenece, aquello que un día será y lo que hoy podemos observar, discurren con normalidad junto a la gran línea de tiempo que nos rodea, solo somos polvo en este vasto océano de tierra, condenados a vivir un gran pasaje de circunstancias que darán forma a nuestro ser, tan atrevido y ambicioso es el deseo de saber por qué estamos atados a esta carne tediosa, a este calabozo de sentimientos que componen cada uno de nuestros huesos, quedan las marcas de inocencia, talladas a flor de piel para recordar que si pasó fue por algo, por muy absurdo que suene, la erosión causada gracias al pesar que te acompaña…

¿Realmente merece la pena? ¿Cuántas veces seremos culpables por nuestra vocación? Ahora, siéntate y dedícate a escuchar, aprende la lección más importante, eres el único que se puede juzgar y, si no fuese así….

Limitados, encarecido sistema adoctrinado por un ideal muerto ¿para que arrastrar tanto si un día todo se esfumará sin ni siquiera poder percibir su fragancia, el perfume de unos pasos vacíos que llevaron a toparse con la cruel realidad que nos concierne, somos conscientes?… ¿Pero hasta que punto? La propia fugacidad te compromete a exprimir cada minuto sin reparo y esos "fallos" cometidos no serán un simple recuerdo, serán todo cuando tengas, ya que gracias a ellos, sentirás ese impulso determinado por el valor de avanzar, de desplegar las ramas cargadas de experiencia, observar la inmensidad y plantearse infinidad de cuestiones trascendentales que al minuto son ocupadas por esa respuesta que asusta a todos.

Crecer regido a unas pautas y determinar un objetivo, coger un racimo de estrellas y soñar con sentirse vivo, bailar ante la hoguera de el mañana y empaparnos con el fulgor de cada presencia, adquirir pedacitos de cada rincón y formar un puzzle de aptitudes aptas para cualquier tarea que te propongas, gritar hacia el cielo y expandir la frondosa copa que demuestra cómo luchaste por adquirir aquello que siempre anhelaste, no hay precio establecido para cada peldaño, pero sí un escarpado risco por el que caer sin seguridad, apostar sabiendo que si pierdes no será en vano en esa etapa que transcurre mientras pasas por alto el hecho de que se te acaban las oportunidades y se desprende poco a poco la corteza, queda mucho aún, aunque sientas que nada es necesario, así que saborea el premio otorgado por las hazañas, puedes sentirte libre ahora, cuando todo acaba. 

Sale a flote un presagio antiguo y en su momento justo te hará sentir frustrado a la par que cansado, parece sencillo tirar la toalla y llegar a un punto medio, pero, si lo haces, ya no quedará esperanza, tras esa puerta se halla una forma de escapar aunque sin ser concreta.

Llegados a esta situación y sin mayor respuesta, hoy acaba mi legado, queda viva su constancia.

By: A.V.G.A